27 de marzo, 2024 //

Estos días en consulta me estoy encontrando el tema de no sentirse viste, escuchada, respetada o tenida en cuenta por mamá, y por extensión, por papá y los demás. Una herida que nos lleva a hacernos pequeños, no ocupar nuestro espacio, no mostrarnos y no tener voz propia.

Esta herida hemos de soltarla con la intención firme en dejar de sentirnos culpables, pequeños e insignificantes, y dejar de esperar que otros nos den el permiso para ser nosotros mismos y ocupar nuestro espacio en el mundo.

Mamá no te pudo dar lo que no recibió, y te trató a ti como trata su niña herida interna, negando y suprimiendo su dolor. Hónrala y libérate de la expectativa de que algún día se dará cuenta de ti. La temporada de eclipses nos invita a abrirnos a nuestra verdadera esencia, y para eso nadie nos puede dar el permiso.

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